Todo lo que necesita saber sobre el síndrome del intestino irritable (SII)
¿Qué es el Síndrome del Intestino Irritable (SII)?
El Síndrome del Intestino Irritable, comúnmente conocido como SII, es un trastorno del tracto digestivo que afecta el estómago y los intestinos. El SII puede causar dolor y calambres abdominales generalizados, distensión abdominal, gases y estreñimiento y/o diarrea. A diferencia de otros trastornos intestinales, el síndrome del intestino irritable no causa ningún daño al tracto intestinal.3 tipos de síndrome del intestino irritable
Hay 3 tipos principales de síndrome del intestino irritable:
- El SII-D es el tipo principal de SII que causa principalmente heces blandas y acuosas (diarrea) junto con molestias abdominales e hinchazón
- IBS-C causa estreñimiento crónico con malestar abdominal e hinchazón
- IBS-M, o tipo mixto, que causa una combinación de diarrea y estreñimiento, así como molestias abdominales, gases y/o distensión abdominal
Causas del SII
El síndrome del intestino irritable (IBS, por sus siglas en inglés) no es una enfermedad muy conocida y los científicos no están del todo seguros de qué lo causa, aunque a menudo comienza después de un episodio de diarrea severa causado por una infección bacteriana o viral. El síndrome del intestino irritable también puede ser causado por un crecimiento excesivo de bacterias en el tracto digestivo.
Si alguien en su familia inmediata tiene el síndrome del intestino irritable, tiene de 2 a 3 veces más probabilidades de desarrollarlo usted mismo.
¿Qué causa los síntomas del SII?
El tracto intestinal está revestido con músculos que se contraen para ayudar a que las heces se muevan a través del intestino. Con el SII-D, los músculos de los intestinos se contraen más rápido y por períodos de tiempo más largos de lo normal, lo que provoca gases, hinchazón y heces acuosas. Por el contrario, con IBS-C, los músculos del intestino se mueven más lento y más débil de lo normal, provocando heces secas que provocan estreñimiento.
¿Quién se ve afectado por el síndrome del intestino irritable (SII)?
Síndrome del intestino irritable es un trastorno gastrointestinal muy común que afecta aproximadamente al 15% de la población. Las mujeres tienen el doble de probabilidades de desarrollar SII que sus contrapartes masculinas y el diagnóstico generalmente ocurre antes de los 40 años, a menudo en la niñez y en la adultez temprana.Diagnóstico del síndrome del intestino irritable
Desafortunadamente, no existe una prueba específica para diagnosticar el SII, por lo que su proveedor de atención médica tomará un historial de sus síntomas y realizará un examen físico para ayudar a hacer un diagnóstico. Ocasionalmente, su médico puede realizar pruebas adicionales, como análisis de sangre o una colonoscopia, para descartar otros trastornos intestinales más graves, como la enfermedad celíaca, la enfermedad de Crohn y la colitis, la diverticulitis, etc.
Síntomas como heces con sangre o sangrado del recto, pérdida de peso y anemia son signos de algo más serio y deben requerir más pruebas.
Comorbilidades comunes con el síndrome del intestino irritable
¿Qué es una comorbilidad?
Una comorbilidad es una condición crónica superpuesta que coincide con una o más condiciones crónicas a largo plazo. Los estudios muestran que al menos el 50% de los pacientes con SII tienen una o más comorbilidades. El SII tiene bastantes comorbilidades que incluyen, entre otras, las siguientes:
- Dispepsia
- Ansiedad y depresión
- Migrañas
- fibromialgia
- Lupus eritematoso sistémico (LES)
- Cistitis intersticial
- Síndrome de fatiga crónica
Tratamiento del síndrome del intestino irritable
La mayoría de las personas con SII pueden controlar sus síntomas con cambios en el estilo de vida, reducción del estrés y modificaciones en la dieta. En raras ocasiones, se pueden necesitar medicamentos.
Puede ser útil llevar un diario de alimentos y síntomas durante varias semanas seguidas para ayudar a determinar qué alimentos pueden causar un brote de SII. Llevar un diario puede ayudarlo a notar patrones de diarrea o estreñimiento, así como gases, hinchazón y molestias abdominales. Si descubre que ciertos alimentos son un desencadenante para usted, puede ser útil eliminarlos de su dieta por completo.
Si bien todos reaccionan de manera diferente a ciertos alimentos y grupos de alimentos, muchos pacientes con SII encontrarán cierto alivio con ciertas dietas como sin gluten, FODMAP, Protocolo AIP, etc.
Cambiar la forma en que come también puede ayudar a controlar sus síntomas. Comer porciones más pequeñas a lo largo del día y reducir la velocidad con la que come puede ayudar a reducir los brotes del SII, además de asegurarse de no comer demasiado cerca de la hora de acostarse.
Tomando una alta calidad, probiótico multicepa puede ayudar a reducir la gravedad de los síntomas del SII. B. longum, L. plantarum y L. acidophilus son cepas probióticas excelentes para ayudar a controlar la diarrea asociada con el SII-D.
Preguntas frecuentes sobre el síndrome del intestino irritable
¿Cuándo es el mes de concientización sobre el Síndrome del Intestino Irritable?
Abril es el Mes de Concientización sobre el Síndrome del Intestino Irritable para crear conciencia sobre este trastorno que afecta aproximadamente a 1 de cada 20 personas.
¿Es el SII una enfermedad autoinmune?
No, el SII no es una enfermedad autoinmune; sin embargo, es una comorbilidad común con varias enfermedades autoinmunes sistémicas.
¿El SII aumenta el riesgo de cáncer colorrectal (de colon)?
No, tener SII no aumenta el riesgo de desarrollar cáncer de colon u otros tipos de cáncer. Si experimenta síntomas de sangrado rectal o heces con sangre, consulte a su médico para realizar más pruebas, ya que estos no son normales solo en el síndrome del intestino irritable.
¿Pueden los probióticos ayudar al SII?
Los estudios han demostrado que los probióticos son beneficiosos en el tratamiento del SII y pueden ayudar a ralentizar los músculos del intestino, mejorar la consistencia de las heces y reducir la frecuencia de las deposiciones. Algunas de las cepas más beneficiosas incluyen Bifidobacterium longum, Lactobacillus plantarum y Lactobacillus acidophilus.